En estos tiempos, en que la revuelta pareciera estar indecisa, en que la acción directa se pone en duda e incluso se la rechaza, quisiera refutar esas posiciones «legalistas» y argumentar sobre mi posición de que la acción directa es el uso de la violencia necesaria en la lucha que encarnamos contra el poder y su aparataje.
¿Se ha atacado al poder en forma eficaz?, si analizamos la historia de luchas por la emancipación total, comprenderemos que por múltiples factores la lucha se entrampa por: golpes represivos recibidos, incapacidad de articularse, traición de los partidos P.C, P.S e izquierdas, por optar por el repliegue, por posiciones pasivas y partidarias, por el no uso de la violencia legitima, por posiciones reformistas, etc…etc, aca nosotros nos entrampamos en lo mismo sin aprender aún la lección.
Si realmente deseamos atacar el poder, no debemos desechar ninguna herramienta de lucha, la acción de emplear la violencia en nuestro accionar es correcto y necesario, ya que la violencia y el abuso estatal permanente así lo amerita, no podemos reaccionar de otra forma, tampoco podemos dejar de lado al autogestión de recursos para crear condiciones optimas o mínimas en nuestra lucha (of de abogados, compra de medios, propaganda y difusión, ayuda a hermanxs presxs y sus familias, etc…)
¿Cómo auto gestionar recursos? ¡Expropiando! Debemos ser capaces de operar en ese sentido, con hermanxs capaces, con los medios indispensables y la claridad que este accionar fortalecerá nuestra lucha.
Debemos crear espacios libertarios en donde propagar la idea y crear consciencia, (talleres, bibliotecas, centros sociales…etc) Debemos abocarnos a ataca el poder desde todos los ángulos, fortalezcamos la idea, cada unx de nosotrxs debe ser un cuadro consciente de acción directa, la propaganda y difusión es fundamental para despertar consciencias, retroalimentar la idea para sembrar la rebeldía emancipadora.
¿Es estrictamente necesario optar por el repliegue cuando el enemigo acecha o nos marca? creo que no, podemos desplazar nuestro radio de acción hacía otros sectores u objetivos, nunca dejar de accionar, no podemos detener nuestra lucha porque el enemigo nos acecha, nuestro accionar debe ser permanente, ojalá en ataques varios o simultáneos en diferentes objetivos, de esa forma la represión deberá dividir sus fuerzas y no podrá copar las zonas de nuestro accionar, o por último debemos usar la distracción para asegurar el éxito de la operación principal, debemos ser conspirativxs y compartimentadxs, no debemos marcar rutinas en nuestros desplazamientos y acciones, así evitamos ser descubiertos y le hacemos difícil la tarea al enemigo.
La negación de la violencia es la causa principal de nuestra dificulta para lograr la liberación total, es necesario cesar con las condenas hacia el accionar violento para que podamos lograr avanzar hacia la emancipación, se debe reconocer el derecho, la necesidad y el deber de todo ser consciente de la autodefensa hacia la violencia estatal que permanentemente nos violenta, los objetivos de quienes luchamos y perseguimos la liberación son destruir a los opresores, todo sistema de autoritarismo , iconos del poder, golpear sin cesar el sistema de opresión y crear una sociedad libre y justa, para lograr esto debemos hacer uso de la violencia; el creer en la no violencia nos hace retroceder hasta dejarnos en una posición hipócrita, arrinconados por culpa de argumentaciones cómodas y simplistas.
Esperando que estas líneas sean un aporte a la lucha por la emancipación total.
Fraternalmente a ustedes.
José Miguel Sánchez Jiménez
Desde el Centro de Exterminio Colina II. Modulo 4