«Si volviese a ser más joven saldría a la calle encapuchada»-Luisa Toledo-
Semanas antes de conmemorarse un nuevo 11 de Septiembre la orden del Poder y las policías respecto a la Villa Francia ya estaba clara, así lo deja ver la brutal militarización que vivió la población durante semanas tanto con el estado de Sitio impuesto que restringió la locomoción colectiva como también los controles policiales a diestra y siniestra que formaban verdaderos cercos represivos. Los voceros del régimen por su parte, no se quedaron atrás y volvieron a desplegar burdas puestas en escena para, por un lado justificar la inminente represión como también criminalizar las jornadas de protesta y enfrentamiento.
Es en este contexto donde se desarrolla una nueva conmemoración del 11 de Septiembre en aquella histórica y combativa población. Tras comenzar los primeros enfrentamientos con la policía luego de la marcha al interior de la población, ingresa un escuadrón del GOPE (Grupo de Operaciones Especiales) que arremete con golpes, pateaduras y perdigonazos contra quienes se encontraran por el sector.
El saldo de la jornada represiva en Villa Francia es de 32 detenidos. Tras una serie de golpizas, l@s compañer@s detenidos son llevad@s a la comisaría donde la policía comienza a urdir lo que vendría.
Luego de la arremetida represiva, la policía se dedica a recoger distintas bombas incendiarias que se encontraban en el suelo para luego -dentro de la comisaria- rearmar, ordenar, armar y distribuir las bombas molotov que luego atribuiría a cada compañer@. A veces el criterio policial se centraba en las detenciones anteriores por hechos relacionados mientras que en otras ocasiones la variable era solo el ánimo del miserable de uniforme que se encontraba en el turno. Es así como 14 de l@s detenid@s quedaron acusados de tenencia de bombas incendiarias mientras que 28 por desorden.
Bastardos del LABOCAR llegan a realizar pericias de hidrocarburo, donde se busca determinar la presencia de restos de combustibles en las manos. Días más tarde los resultados de estos exámenes serian negativos.
Tras largas horas pasando de calabozo en calabozo finalmente en horas de la tarde del 12 de Septiembre l@s compañer@s son pasad@s a tribunales en el centro de (in)justicia. Tod@s (tanto por desorden como por porte de artefacto incendiario) quedan en la calle con firma declarándose «ilegal la detención». La fiscalía apela por l@s 14 compañer@s procesados bajo ley de control de armas, buscando encarcelarl@s para que esperen el juicio en prisión preventiva.
El 21 de Septiembre la Corte de Apelaciones mantuvo el rechazo a la prisión preventiva que la fiscalía solicitaba, pero a cambio impuso el arresto domiciliar total para tod@s l@s 14 compañer@s, mientras dure la investigación.
Recordemos que el proceso contra l@s compañer@s continua por lo que el llamado es a permanecer atentos y acompañar el proceso judicial que enfrentan, sin sorprenderse y reconociendo las estrategias represivas y el actuar de las policías a la hora tanto de hacer sentir el monopolio de la violencia como de implantar «pruebas». Ellos no tienen problema alguno con traspasar su propia legalidad para construir procesos.
Porque silenciar las jugadas represivas no las hace desaparecer: ¡¡Solidaridad, fraternidad y apoyo con l@s compañer@s procesad@s por la lucha callejera!!
*Solidari@s Anonim@s*