> Mauri, hermano, compañero guerrero, te abrazo con cada respiro mío. Nosotrxs no miramos el dedo que enseña la luna, nosotrxs no miramos el puño insurreccional que actúa guerrero. Nosotroxs amamos y somos ese dedo, ese puño alegre y fuerte, que señala y golpea la dominación, la explotación, la autoridad. […]