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La huelga de los compas secuestrados por el Estado/Capital trae consecuencias lógicas. El poder se encuentra presionado por la medida de los compañeros-as de exponer sus cuerpos como arma contra la opresión que se da en la cotidianeidad y mucha más fuerte en las cárceles en pos de acomodar cada conducta hacia la valorización del capital. Curiosamente las compañeras Andrea y Mónica, según informaciones “se encuentran recluidas en el S.E.A.S. del centro penitenciario femenino, es decir, no han sido trasladas a celdas de castigo. Su régimen de visita y encomienda sigue de forma regular, obviamente, entran sólo elementos como: agua, agua con sales rehidratantes, útiles de aseo.”. A pesar de esto el Poder ha reconocido la medida como algo que no solo debe acallar (algo que ocurrió luego de las estúpidas pruebas y falta de reales argumentos para mantener a los compas presos, lo que permite que hagan lo que se le da la gana…razón por la cual están en las mazmorras del capital) Pero “Sin embargo, han recibido amenazas de parte de gendarmería sobre represalias y castigos que vendrían a posterior de la huelga.”
Opuesta ha sido la situación de Carlos, Camilo, Rodolfo, Francisco, Felipe. Contra ellos el Estado ha querido amedrentarlos, torturarlos sicológicamente para deponer la acción y así evitar que lentamente su VERDAD, el encarcelamiento al antagonismo (llámese posiciones, ideas, etc.) salga a flote y con ello nuestros hermanos proletarios se den cuenta que se enfrentan a una realidad moldeada no por ellos, sino por el guion del enemigo que no dubitara cuando deba golpear (algo diferente a nuestra historia donde siempre hemos esperado “las condiciones”) De ahí que en un tratamiento inhumano (y no es que pidamos humanidad) los carceleros nos hacen recordar lo que somos en la sociedad capitalista: cosas, viles proletarios despojados de cualquier medio de subsistencia salvo su propia fuerza intelectual y física para vender y sobrevivir (mas allá de los sueldos, la situación es igual), es decir, una mercancía, algo que se ve en el “mercado laboral”…..mercado….vamos a ver los precios del mercado de una lavadora como los capitalistas van a ver los precios del mercado de lo deshumanizados seres humanos, vueltos proletarios, negados en su humanidad. Se informa que “Los compañeros fueron trasladados a celdas de castigo de 2 por 3 metros, sin luz, y sin horas de patio durante un periodo de 10 días, en el cual tampoco recibirán visitas ni encomienda.
Luego de negociaciones por parte de la defensa se permitió el ingreso de agua y sales rehidratantes.”
No queda más que solidarizar y demostrarle al poder que SABEMOS sus encarcelamientos y castigos seguirán hasta que liquidemos la sociedad de clases, y es precisamente aquello lo que nos hace llevar una práctica que alimente la conciencia respecto a una realidad que se aparece inmutable, para ponerla en movimiento y empezar a asumir nuestro rol de creadores de nuestra historia….abolir las separaciones y acabar con todo lo que nos vuelve meros objetos.
