Era hermoso ayudar a un hombre prisionero a evadirse;ello o evadirse uno mismo constituía la experiencia mayor que un hombre libertario podía experimentar. No era honesto dejar a un amigo pudrirse en una mazmorra, sometido y coaccionado a un tratamiento miserable.
También te puede interesar
Compañeros y compañeras: Desde la región argentina, compartimos con ustedes el primer número de Estamos en Guerra, Publicación Anarquista de Contrainformación. Pretende […]
VerbaRoja -VerbaNegra… El movimiento anarquista obrero $hileno tuvo una recomposición y un auge notable luego de la masacre de la escuela Domingo […]
EDITOREAL Dándole un vistazo a la historia de antaño y la reciente de lxs anarquistas de praxis (hermosxs seres que concretan sus […]
El sol calienta el asfalto. El miserable sol. Largas filas para pagar la vida en cuotas. El ruido de los sueños cumplidos […]