02. Recitado (Letra con que los anarquistas cantaban al iniciar sus actos a principios de S. XX)
03. Milonga social del payador libertario (Anónimo 1902)
04. Milonga anarquista (Anónimo 1906)
05. La verbena del anarquista (Anónimo 1905)
06. Este y aquel (Letra de F. Gualtieri)
07. Guajiras rojas (Anónimo 1918)
08. Marsellesa anarquista (1907)
09. Semana trágica (Letra F. Gualtieri 1919)
10. Maldita burguesía (Habanera 1907, Anónimo)
11. Maldición de un maldito (F. Gualtieri 1926)
12. Guitarra roja (Martín Castro 1928)
13. Guerra a la burguesía (Tango 1901, Anónimo)
14. El deportado (Anónimo 1920. Canción del vagabundo de «Alma de Dios», E. Serrano)
15. El héroe (de un payador patagónico sobre el tema de F. Gualtieri)
16. Sacco y Vanzetti (Martín Castro 1928)
17. Marcha «A las barricadas» (Himno anarquista. Guerra Cívil Española)
(himno anarquista)
recitado:
Buenos Aires
primero de mayo de 1904
ya se acercan,
son las columnas anarquistas.
Vienen con sus banderas rojas y negras,
sus estandartes con los nombres de sus gremios:
panaderos, marmoleros, carreros,
carpinteros, pintores.
Son miles y miles que avanzan,
setentamil calculará el diario la Prensa.
La manifestación más grande
de toda la historia argentina,
para un Buenos Aires
que no tiene más de un millón de habitantes.
El estandarte de la Federación Obrera Argentina
se extiende de vereda a vereda.
Al frente,
la banda integrada por compañeros italianos
cantan: Hijo del Pueblo,
la más querida canción anarquista.
recitado:
Hijo del pueblo
te oprimen cadenas
y esa injusticia
no puede seguir.
Si tu existencia
es un mundo de penas
antes que esclavo
prefiere morir.
Esos burgueses
asaz egoístas
que así desprecian
a la humanidad.
Serán barridos
por los anarquistas
al fuerte grito
de la libertad.
Ah, rojo pendón
no más sufrir
la explotación
ha de sucumbir.
Levántate
pueblo leal
al grito de
revolución social.
recitado:
Marchan de Plaza Congreso a Plaza Mazzini,
pero la policía les saldrá al paso.
Se luchará a brazo partido
la represión es tremenda
a tiro limpio.
Un centenar de obreros heridos
quedan en el suelo.
El cadáver del marinero Juan Ocampo
es llevado en hombros por los anarquistas
hasta el local de la protesta.
Así serán todos los primeros de mayo.
Los porteños se esconden en ese día
porque saben que los anarquistas salen a la calle
a recordar a los mártires de Chicago
ahorcados por luchar en pos
de las ocho horas de trabajo.
Pero no sólo cantan
Hijo del Pueblo, en estos actos,
también cantan su himno.
(letra con que los anarquistas cantaban
al iniciar sus actos, a principios de siglo)
recitado:
Oíd mortales el grito sagrado
de anarquía y solidaridad.
Oíd el ruido de bombas que estallan
en defensa de la libertad.
El obrero que sufre, proclama
la anarquía del mundo a través,
coronada su sien de laureles,
y a sus plantas rendido el burgués.
El vil clero a la cara te escupe
y el que manda te aplique se ley.
Y el burgués tu sudor te arrebata
y te matan la patria y el rey.
Viva, viva la anarquía,
viva el pueblo productor.
Libertad, igualdad y armonía,
arte, paz, justicia y amor.
recitado:
Pero así como luchan por la redención social
los anarquistas no olvidan la parte cultural:
diarios, libros, conjuntos filo dramáticos,
revistas culturales.
E introducen una novedad:
El payador anarquista
que, cantando,
lleva sus ideas hasta el rincón
más olvidado de la Argentina.
(anónimo)
1902
cantado:
Grato auditorio que escuchas,
grato auditorio que escuchas
al payador anarquista
no háganse a un lado la vista
con cierta expresión de horror,
que si al decirte quien somos
vuelve a tu faz la alegría
en nombre de la anarquía
te saludo con amor.
Somos los que defendemos,
somos los que defendemos
un ideal de justicia
que no encierre en sí codicia
ni egoísmo ni ambición
el ideal tan cantado
por Reclus y los Graves
los Salvoechea y los Faures
los Kropotkin y los Tudor.
Somos los que despreciamos,
somos los que despreciamos
las religiones farsantes
por ser ellas las causantes
de la ignorancia mundial
sus ministros son ladrones
sus dioses son una mentira
y todos comen de arriba
en nombre de la moral.
Somos esos anarquistas,
somos esos anarquistas
que nos llaman asesinos
porque al obrero inducimos
a buscar la libertad,
porque cuando nos oprimen
golpeamos a los tiranos
y siempre nos rebelamos
contra toda autoridad.
(anónimo)
1906
recitado:
Sí, ya a principios de siglo
las ideas anarquistas han hecho pie
bien tierra adentro
y las cantan payadores criollos.
cantado:
Soy un nuevo payador
del territorio argentino
y voy buscando el camino
de nueva felicidad.
Solamente la verdad
es el arma que yo entono
y con mi canto pregono
el sol de la libertad.
Abajo los usureros
mueran todos los rentistas
todos los capitalistas
y la religión impía.
Que ya se aproxima el día
de la paz universal
y del concierto social
bajo el sol de la anarquía.
(anónimo)
1905
(«El mantón de Manila», de
«La verbena de la Paloma», T. Bretón)
recitado:
Pero no sólo payadores
actuaban para expander la idea anarquista
en medio de las asambleas obreras
irrumpían muchachas y muchachos
que cantaban la Verbena Anarquista.
cantado:
¿Dónde vas con paquetes y listas?
Que de prisa te veo correr
Al Congreso de los anarquistas
por hablar y hacerme entender.
Explicadme un momento siquiera
anarquista, ¿qué quiere decir?
La inmensa falange obrera
que reclama el derecho a vivir.
El obrero que suda y trabaja,
¿Dime cómo es que puede estar mal?
Pues el burro que come la paja
lleva el grano para otro animal.
Es extraño, pero no lo entiendo
que pretende tu nueva alusión
Que lo mismo le va sucediendo
al obrero con su producción.
(F. Gualtieri)
febrero – 1923
Primero de mayo de 1909
los anarquistas ocupan totalmente
la Plaza del Congreso.
Frente a ellos,
está nada menos que el coronel Ramón Falcón
al frente de su caballería,
los cosacos,
como serán llamados por los obreros.
La represión es cruel.
Caen ocho obreros muertos
y ciento cinco heridos.
Entre los manifestantes
está un adolescente,
un ruso llamado
Simón Radowitzky
y en el once de noviembre
de ese año,
hará volar por el aire
con una bomba
al coronel Falcón y a su secretario.
El país se conmociona,
el anarquista es apresado
y pasará veintiún años en Ushuaia,
la Siberia argentina.
Será el mártir,
el santo de la anarquía,
cantado por todos los payadores libertarios.
cantado:
Simón nació en un tugurio
de un pueblo, de un continente
como nace una simiente
por una ley natural.
Sin patria como el progreso
como es el arte y la ciencia
el amor y la conciencia
sin patria como el ideal.
Falcón nació en un palacio
sonriéndole la fortuna
meciéndose en blanca cuna
de pequeño Napoleón.
Éste reconoció patrias
y misiones en la tierra
fue profesor en la guerra
coronel de la nación.
Simón como hombre de ideas
con conceptos libertarios,
divulgó en los proletarios
el amor y la igualdad
una universal familia
de cultos trabajadores
sin esclavos ni señores
sin leyes ni propiedad.
Falcón como buen soldado
con arcaicos oropeles
propagaba los cuarteles
a la patria nacional
y así requería patriotas
debajo de su manto
fueran a su voz de mando
una avalancha mortal.
(anónimo)
1918
recitado:
Pero no sólo el ritmo de milonga
usan los libertarios para sus canciones de lucha,
sino también la guajira.
cantado:
Deseo mi redención
y vivir sin vividores
que con los trabajadores
hacen vil explotación.
Política y religión
desaparezcan del mundo
y al abismo más profundo
caigan violentamente,
papa, rey y presidente
con todo el cortejo inmundo.
El pan que el obrero amasa
coma con dicha cumplida
y que el derecho a la vida
goce sin traba y sin tasa.
Que el albañil tenga casa,
y el sombrerero sombrero,
que nos e robe al obrero
el fruto de su labor
y que no haya explotador,
sacerdote ni guerrero.
Que dos seres que se aman
sean libres para amarse
sin tener que ir a humillarse
ante un zángano haragán,
deseo con gran afán
y en venturoso día
que urdiendo a la tiranía
en la poza del pasado
sea el amor libertado
implantando la anarquía.
8 – MARSELLESA ANARQUISTA
1907
recitado:
Enero de 1919.
En los talleres metalúrgicos Vacena
luchan obreros contra el ejército.
El combate es sin cuartel.
Los trabajadores tienen cuantiosas
pérdidas de vidas.
En las barricadas
cantan la Marsellesa Anarquista.
recitado:
A la revuelta proletario
ya brilla el día de la redención
que el sublime ideal libertario
sea el norte de la rebelión.
Dignifiquemos del hombre la vida
en un nuevo organismo social
destruyendo las causas del mal
de esta vil sociedad maldecida.
¡Obreros a luchar!
¡A la revolución, con decisión!
A conquistar nuestra emancipación.
9 – SEMANA TRÁGICA
(F. Gualtieri)
1919
recitado:
La masacre de los obreros
será tema de los payadores
durante muchos años.
Así apostrofaban al culpable
de las reacciones,
que provocaron los sucesos
de la semana trágica.
recitado:
Oh, histriónico cretino
oh, satánico bribón
los clarines tocan notas
de vibrantes clamoreos
preanunciando los derrumbes
de tu casta y tu sistema
y ni leyes
ni poderes
ni las fuerzas equipadas
podrán nunca detener
la avasallante cometida
de la próxima revuelta proletaria
que fermenta en muchos pechos
ya cercana a reventar.
Barricadas
a millares se alzarán por esas calles
y a la música infernal de los fusiles
y a la voz alentadora
de la brava dinamita
reventando en arsenales
en palacios y en conventos
y doquier hay fuerza viva
defendiendo el tambaleante
simbolismo gubernal.
Verás rostros encendidos,
verás testas desgreñadas,
verás ropas destrozadas,
empapadas en la sangre
de su mismo cuerpo herido.
Verás puños levantados,
verás dientes afilados,
verás ojos llenos de odio
escrutando tu forteza
para ver si tu carroña
aún resiste a los embates
de la furia popular.
Para ti no habrá perdón,
para ti no habrá piedad.
Tus infames fechorías
no se borran, no se olvidan
ni se dejan de saldar.
Mefistófeles infame,
traficante de conciencias obreriles,
inservil, degenerado, libertino,
licencioso, disoluto, pervertido,
buhonero miserable
sin conciencia y sin pudor.
Vil chupóptero insaciable
de la sangre dulce y pura
de este pueblo laborioso.
Vil criatura indecorosa
que no vales lo que vale
el defecado de un obrero.
Hombre triste,
hombre malo,
hombre inútil,
hombre inmundo,
pernicioso, testaferro,
larva fétida y biliosa.
Yo te lanzo la blasfemia
de este siglo,
yo compárote al infame papa negro de la Rusia,
yo te aplasto con la carga miserable
de otro nombre
yo te llamo, tenlo en cuenta,
con el nombre más inmundo,
yo te llamo:
¡Rasputín!
10 – MALDITA BURGUESÍA
(habanera)
(anónimo)
1907
recitado:
El ritmo de la habanera
también era bueno
para la canción revolucionaria.
cantado:
Ay, maldita burguesía
cuantos pesares haces sufrir
mientras exista tu raza
será imposible vivir.
Pero el obrero con decisión
va preparando la revolución
y a cada infamia gubernamental
surge un Caserio un Artal.
Venga pronto la anarquía
venga ya la libertad
que cuando llegue ese día
será la vida felicidad,
que cuando llegue ese día
será la vida felicidad.
11 – MALDICIÓN DE UN MALDITO
(F. Gualtieri)
1926
recitado:
Por los años veinte,
el poeta Fernando Gualtieri
conmocionaba a las reuniones anarquistas
con su «Maldición de un maldito».
recitado:
Desde un recóndito punto asimétrico
de este terráqueo mundo infernal
se oye el omnímodo grito de rápsoda
pregón ubérrimo del mal social.
Yo vengo grávido como una esférica
mujer simbólica llena de preñez
con miles mágicas palabras bíblicas
y un nuevo oráculo que yo forjé.
recitado:
Este fragmento es representativo
de la poesía anarquista
que buscaba dar a los obreros,
ansiosos de aprender nuevas imágenes
y uso de palabras no muy conocidas.
Era un tanto tremendista,
pero muy del gusto de la época.
La «Maldición de un maldito»
constaba, además, de cuarenta estrofas,
una verdadera maratón poética.
12 – GUITARRA ROJA
(Martín Castro)
1928
recitado:
En esos años
aparecerá el gran cultor
de la payada libertaria;
será el payador rojo
Martín Castro.
cantado:
Ven guitarra libertaria
libertaria y redentora
del que sufre
del que llora
del delincuente y el paria.
Tu acorde no es plegaria
el servilismo indecente
el bardo altivo y valiente
cuando te pulsen sus manos
ante todos los tiranos
sabe atacarlos de frente.
Guitarra que entre mis manos
vibras y ruges conmigo
fiel amiga de este amigo
pregón de versos humanos
y en tus trinos soberanos
del libertario cantor
se inspira en versos de amor
de rebelión y templanza
augurando una esperanza
en los hijos del dolor.
Guitarra, los payadores
hicieron de tu cordaje
palenque del caudillaje
para amasar electores
rutinarios, corruptores
en vez de hacerte valer
te hicieron envilecer
con caudillo de partido
guitarra, guitarra te han corrompido
como una débil mujer.
Guitarra, si en mi vejez
llegara a serte profano
quisiera ser un insano
sin vista y en la mudez
si pierdo la rigidez
del convencido varón
antes de hacerte un baldón
coyunda para tus notas
quiero, quiero ver tus cuerdas rotas
quebrado tu diapasón.
13 – GUERRA A LA BURGUESÍA
(tango)
(anónimo)
1901
recitado:
El tango también tuvo letra anarquista
y se cantaba en los típicos picnic
que los anarquista hacían
en la isla Maciel.
cantado:
Querrá la gente burguesa
sin distinción de color
que chupa la sangre humana
del pobre trabajador.
Mientras los unos revientan
a fuerza de trabajar
otros se pasan la vida vagando,
sin cesar,
otros se pasan la vida vagando,
sin cesar.
Es un deber,
justo y leal
que el pueblo luche por la existencia.
Es un deber,
justo y leal
que el pueblo luche por la existencia.
Verán, al que más trabaja
no tiene ni que comer
y aquellos que nada hacen
disfrutan a su placer.
Ya que el derecho a la vida
los quita ese gran rival
¡obreros, tened conciencia!
y guerra al dios capital,
¡obreros, tened conciencia!
y guerra al dios capital.
14 – EL DEPORTADO
(anónimo)
1920
(Canción del vagabundo – de
«Alma de Dios», E. Serrano)
recitado:
Pero no sólo el peligro de la cárcel
tienen que enfrentar los anarquistas.
Sobre ellos, en su mayoría extranjeros
se cierra la 41-44,
la ley de residencia.
Expulsión del país.
Así cantaban a sus compañeros deportados.
cantado:
Es trabajar sin descanso
tu cruel destino,
o mendigar triste y manso
por el camino
Desesperado
ya de vivir
lucho abnegado
contra lo vil.
Canta deportado
mísero y martirizado
que tu ideal quizás
un día triunfará
dando a los hombres
amor y libertad.
15 – EL HÉROE
(de un payador patagónico
sobre el tema de F. Gualtieri)
recitado:
Veinticinco de enero de 1925.
El anarquista alemán
Kurt Gustav Wilckens
mata al teniente coronel Varela,
frente al primero de infantería,
en Palermo.
Lo hace para vengar la muerte
de mil quinientos obreros, en Santa Cruz,
fusilados.
En la Patagonia
todavía hoy se recuerdan estos hechos.
En una olvidada localidad cordillerana
escuchamos, cincuenta años después,
al octogenario Gabino Pérez,
entonar estas estrofas,
acompañándose con la guitarra.
recitado:
Bajo el mando de Varela
ésta hóspita y gran capital
mil soldados partieron ufanos
con un aire solemne y marcial.
Y llegaron allí, donde muchos
proletarios repletos de afán,
con la huelga, que es su única arma potente,
defendían su mísero pan.
Emboscadas, traiciones, violencia
es la norma del buen militar.
Fueron armas corrientes que usaron
los que iban el fuego, a apagar.
16 – SACCO Y VANZETTI
(Martín Castro)
1928
recitado:
En 1927 un grito cruza el mundo entero:
¡Libertad para Sacco y Vanzetti!
Los dos anarquistas italianos
condenados en Estados Unidos.
Todo el mundo lucha por ellos.
Aquí, en Buenos Aires,
hay huelgas, mitines,
explotan bombas en la embajada de Estados Unidos
y en la Ford.
Pero nada se puede hacer;
Sacco y Vanzetti son ejecutados en la silla eléctrica.
Martín Castro, el payador rojo,
hará oír su protesta.
cantado:
Patria del rubio metal
patria del rubio metal
del oro diablo amarillo
país del yunque y del martillo
y patria del mineral.
Norte América es genial
en el arte de la guerra
es marca en candente hierra
que ha de surgir y arrastrar
como flagelo del mar
como azote de la tierra.
Por sobre sus fundiciones
y el organismo mecánico
sobre el armazón titánico
de remaches y bulones
se alzan, como dos pendones,
dos banderas de ideal
los gestos de alta moral
con un amor Espartaco,
dos nombres: Vanzetti y Sacco,
que irán al sillón fatal.
17 – MARCHA «A LAS BARRICADAS»
(himno anarquista – Guerra Civil española)
recitado:
Seis de septiembre de 1930
Uriburu toma el poder
y clausura locales y sindicatos anarquistas.
Centenares de libertarios
son encerrados en la cárcel de Ushuaia.
Severino di Giovanni y Paulino Scarfó
son fusilados en la penitenciaría.
Años más tarde, el presidente Justo
aplicará con mano férrea
la ley de residencia.
El anarquismo en la Argentina
comienza a declinar,
y en 1936 los anarquistas del mundo entero
se darán cita en España,
para defender la República Española.
Allí, su grito de guerra será
¡A las barricadas!
y así se llamará su himno.
En Madrid, en Teruel,
en Barcelona y en el Ebro,
se desangran las columnas anarquistas
que luchan contra Franco.
Hasta que todo se acabe.
Allá,
en la guerra civil,
quedaron los mejores.