SANTIAGO, CHILE: PALABRAS DE JOSÉ MIGUEL SÁNCHEZ A LXS COMPAÑERXS Y GRUPOS DE ACCIÓN CLANDESTINA EN TODO EL MUNDO

A las mentes conscientes que combaten en la lucha callejera en todo el orbe…

Es tan ingenuo pensar en una rebelión generalizada, cuando lo que ha hecho el pueblo pobre desde hace siglos es someterse a normas y ser un esclavo remunerado pasivo, con entes pasivos, haciendo que la clase dominante se haya nutrido desde siempre, dictando normas y leyes hechas a su medida para seguir enriqueciéndose con el consentimiento de un pueblo acostumbrado a ser sumiso hasta la estupidez, siempre esperando una migaja por su sometimiento.

¿Dónde están lxs insurrectxs?… En poblaciones, barrios, universidades, liceos, etc. ¿Cuántxs dispuestxs a asumir la lucha en todos sus aspectos?… siempre pocxs. Lo que se necesita es crecer en determinación y convicción, ya que sabemos que la burguesía es y será una fuerte y poderosa enemiga. En la lucha de clases somos muchxs más, pero ellxs cuentan con la venía y protección del Estado, por lo que poseen tecnología de punta, con el servilismo protector de lxs esbirrxs policiales y con toda su disposición. Ellxs cuidan y protegen con uñas y carne sus posesiones, pero nosotrxs debemos usar todo para demolerlos.

Tenemos la razón más importante para derrotarles, y eso es el deseo de ser libres de verdad, el no tener ningún tipo de autoridad a quien someterse. Eso es mayor que todo. Si tenemos la convicción de estar en una guerra de clases, debemos prepararnos para todo, estar dispuestxs al uso de todos los elementos y actos para derrotar a la clase privilegiada y su Poder; También se debe tener en cuenta los peligros que la acción conlleva, como puede ser la prisión o la muerte, cada unxs de nosotrxs debe ser un ente consciente y actuar en consecuencia.

“Ni Dios, ni ley, ni patria.
Cada hombre sea un Ejército,
nadie obedezca a nadie.
Ni altares, ni sanciones, ni banderas
que no encuentren los esclavos
donde atarse (…)”

Verso recitado por Catalina Solís Gutiérrez, 90 años (2012), hija de
Osvaldo Solís Soto, anarcosindicalista asesinado por los pacos el 27 de
diciembre de 1932.

José M. Sánchez Jiménez